Clasificación
Por su longitud
Arma
corta o de Puño. Arma de reducido tamaño, fácil de llevar y ocultar, apta para
combates a corta distancia y en espacios cerrados (defensa personal), no
necesita punto de apoyo, son de tipo semiautomático con cargador lineal: la
pistola y tambor giratorio: el revólver.
Arma larga o de hombro. Arma portátil, automática,
semiautomática o de repetición, dotada de culata fija, plegable o extensible
cuya longitud del cañón sea superior a 16 pulgadas. Para su empleo normal
requiere de las dos manos y el apoyo de la cintura o el hombro. Es apta para
combates a gran distancia y en espacios abiertos, ejemplo: la carabina, la
escopeta, el fusil.
Arma
mediana. Arma que en forma indistinta puede emplearse con o sin punto de apoyo
porque está dotada de una empuñadura y un culatín metálico plegable o
extensible. Puede disparar tanto en modalidad semiautomática como en
automático. Ejemplo: subfusil o metralleta.
Por su funcionamiento
Armas
de tiro simple (mono tiro). Son aquellas que cada vez que se efectúa el
disparo, requiere la extracción y expulsión manual del cartucho utilizado, el
alojamiento de uno nuevo en el interior de la recámara y el cierre de la misma
antes de quedar dispuesta para un segundo disparo, pues carecen de cargador,
depósito o almacén. Ejemplo: las escopetas de caza, pistolas y carabinas
deportivas y rifles lanza gas.
Armas
de repetición. Son aquellas que estando dotadas de cargadores o depósitos de
munición, pueden efectuar disparos sucesivos, necesitando entre uno y otro, que
el mecanismo sea manipulado por el tirador para alimentar la recámara con un
cartucho, extraer y expulsar la vaina luego del disparo. Pueden ser de cerrojo,
de palanca y de corredera o pump action. Ejemplo: el fusil Máuser, los rifles
Winchester, la escopeta Mossberg.
Armas
semiautomáticas. Son aquellas que
requieren de una primera operación de carga con la introducción del primer
cartucho en la recámara, que luego de su percusión tan solo es preciso oprimir
de nuevo la cola del disparador para obtener el segundo disparo y así
sucesivamente hasta agotar la capacidad del cargador. Este accionamiento puede
ser efectuado por el movimiento libre del cerrojo (blow-back), como en el caso de las armas en calibre .22
LR o por aprovechamiento de los gases; ejemplo: la carabina M-1, la pistola
Browning.
Armas
automáticas. Es aquella arma capaz de
disparar una rápida sucesión de proyectiles, hasta agotar la munición del
cargador o soltar el disparador mientras se mantenga presionada la cola del
disparador. Esta sucesión de disparos que se produce a gran velocidad es lo que
llamamos “ráfaga” y a la velocidad de disparos “cadencia” y suele medirse en
disparos por minuto (dpm). Los modelos más modernos pueden ser dotados de
dispositivos que permiten disparar ráfagas cortas, generalmente de tres
disparos, consiguiéndose economía de munición y mayor precisión de los impactos
por el mejor control del arma. Como en el inciso anterior, también es necesario
una primera operación de carga manual. Ejemplo: el fusil de asalto CETME, el
subfusil FMK-3, la ametralladora M-60.
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